Diego el Cigala canta a México

por Verónica Aguirre

Intérpretes de estilos musicales muy diversos han rendido homenaje a México con su propuesta y su voz. Pero, sin duda, el nuevo material de Diego el Cigala es superior a lo que hayas oído. A través de doce canciones, el artista hace un recorrido por la música mexicana de diferentes géneros y épocas, y nos hace recordar nuestras raíces. El material realmente conecta con quien lo escucha. Para saber más sobre esta producción y su próxima presentación en el Auditorio Nacional, conversamos con Diego El Cigala.

 

¿Qué conectó al Cigala con estas doce canciones?

Sobre todo, muchísima emoción e interpretación a la hora de cantarlas, porque son temas que se han escuchado en voz de José Alfredo, Vicente, Chavela y Juan Gabriel, entre otros, y la profundidad de sus letras me emociona. Creo que para cantar estos temas tienen que tocarte el alma, para proyectar el sentimiento que les inyectó el autor al escribirlas.

Si bien todas las canciones son mexicanas, no todas son de mariachi. Nos llevas por un viaje musical extraordinario; es más, un trío te acompañó en “Si tú me dices ven”, un tema emblemático de Los Panchos.

Sí, son los herederos de Los Panchos. Cuando los vi entrar al estudio para grabar esta canción, casi me vuelvo loco de la emoción, porque escuchar esas voces angelicales es maravilloso.

¿Cómo fue trabajar con Armando Manzanero?

Era un hombre muy recto, y demasiado serio a la hora de trabajar. Cuando le presenté la grabación, nos vimos en las oficinas de la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM) porque le había dicho que íbamos a cantarla juntos, pero yo iba apanicado, porque no sabía cómo iba a reaccionar. Cuando le di la versión que grabé con el Mariachi Vargas, me felicitó y me dijo que no había escuchado una versión así. Trabajamos varias veces juntos en Campeche, y sentí mucho su partida. Me habría gustado tenerlo conmigo en el Auditorio Nacional.

¿Cómo fue para ti cantar con el Mariachi Vargas?

Cuando entré al estudio de grabación y los vi tocando “El gato bajo la lluvia” y “Somos novios”, de la emoción me puse a llorar, y como también estábamos grabando el video, al estar rodeado de ellos me sentí en la Plaza Garibaldi. Es un mariachi con mucha profundidad, profesionalismo y una musicalidad increíble. 

Para ti ¿qué tienen en común la canción flamenca y la mexicana?

Que son raíces del pueblo. El flamenco es un lamento gitano del pueblo; son canciones con mucho corazón, romanticismo y hondura; la ranchera y el bolero mexicano tienen también esa profundidad y bohemia. Mi querido Joaquín Sabina me decía: “El flamenco y las rancheras van de la mano; son músicas de estado puro, músicas de corazón, sin trampas ni cantón”.

¿Cómo es que Diego El Cigala hace que estas canciones toquen las fibras más hondas del alma?

Porque lo hago con mucho corazón y respeto.

¿Qué llevó a Diego a dedicarse a la música flamenca?

Porque como futbolista no iba a dar la talla (risas). Nací del vientre de una madre cantaora y de un padre cantaor. Somos cuatro hermanos, y fui el único que siguió sus pasos. En el patio de mi casa he vivido mucho arte; muchos artistas y genios llegaban con mi padre del tablao. Siendo niño, lo único que hacía era oír, ver y callar. Cuando mi padre me decía “canta” y le respondía que no, me costaba un coscorrón (risas). Con el flamenco se nace y con el tiempo se hace, ésa es la verdad.

¿Qué canción te recuerda a tu papá?

De niño siempre me cantaba mi padre con bulería:

A la lima y al limón, que tú te vas a quedar soltera

Qué penita y qué dolor, que tú no tienes quien te quiera

Que penita y qué dolor, gitano que llama a mi puerta, sí, sí

Que se llevó mi corazón, a la lima y al limón…

Ésas eran las canciones que me cantaba mi papá, él escuchaba a José Alfredo, Agustín Lara, Lucho Gatica, Antonio Machín, Benny Moré, Rolando Laserie…

¿Qué le diría Diego adulto al Diego pequeño que iba tras la pelota?

Le diría: “Diego, no lo conseguiste” (risas). No es cierto. Le diría a ese niño travieso, juguetón, que le gustaba mucho la bici y el balón, pero que le gustaba mucho más cantar y tenía el sueño hacerlo… no de ser una figura, porque lo veía súper difícil: “Dieguito, compadre, lo hemos conseguido”, (risas).

Si yo fuera a Madrid, ¿qué lugar tendría que visitar para decir que lo conocí?

Tendrías que pasar por la Plaza Mayor de Madrid, pasear por la Cava Baja y sus mesones para disfrutar su gastronomía, y por qué no, ir a uno de los tablaos flamencos como El Corral de la Morería. Luego tendrías que darte una vuelta por el Parque del Retiro, para decir: “Estoy en Madrid, pedazo de la España en que nací”. Caminar por el Barrio de Lavapiés, que Agustín Lara lo describió muy bien sin haber ido.

El mejor consejo que recibiste de tu familia…

Que siguiera mi sueño, que nunca tirase la toalla y que siempre fuera honesto.

¿A qué otro país quisieras dedicarle un disco?

Me gustan mucho los sonidos de la música peruana y la música brasileira. Tengo en mente hacer un disco de música clásica llevada al flamenco; pronto haré un disco de flamenco fusionado con la música árabe. En Marruecos hay grandes músicos con los que quiero trabajar.

Concierto Cigala canta a México

  • Auditorio Nacional
  • Jueves 5 de mayo, 20:30 hrs.
  • Boletos en Ticketmaster
  • Auditorio Telmex (Zapopan, Jalisco)
  • Viernes 29 de abril, 21:00 hrs
  • Boleto en taquillaa y Ticketmaster

Sigue a Diego el Cigala en IG @elcigalaoficial

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