creador de sensaciones
El destacado artista plástico español Antonio Navarro Menchón heredó de su padre el gusto por la pintura. Inició su camino en el arte siendo muy pequeño, y aunque hizo carrera militar, jamás se alejó de sus raíces artísticas. Hoy su obra puede verse en el Palacio Real de Madrid, pues él realizó el primer retrato oficial del rey Felipe VI de España, además de en el Museo Histórico Militar de La Coruña y el Real Casino de Murcia, entre otros sitios igualmente importantes. Su obra se ha expuesto en Alemania y México, y se encuentra en varias colecciones particulares en todo el mundo.
¿Cómo se describe Antonio Navarro Menchón?
Comprometido. A mí y a mis pinturas nos mueve el gran peso de mis raíces y la responsabilidad que mi obra ha ido adquiriendo desde el momento en que comenzó a tener observadores. Creo que el arte tiene una gran responsabilidad social y cultural, y para los artistas tiene que ser habitual comprometerse con la obra que producen.
¿Por qué ser pintor?
Ser pintor me permite y me obliga a tener una mirada compleja del mundo. Es algo que se lleva dentro y que no puede forzarse, pero tampoco se puede renunciar a ello.
¿Antonio Navarro Menchón es un pintor realista, hiperrealista, o algo que va más allá?
Mi pintura siempre se ha inspirado en el naturalismo y el realismo, y con los años mis obras han ido ganando en matices y naturalidad. Esta evolución, sobre todo en el retrato, me ha conducido a una técnica basada en infinidad de pequeñas pinceladas, como una suerte de “microimpresionismo”, posteriormente complementado con veladuras. Intento así aproximarme a las infinitas posibilidades del color y la luz, y ponerlas al servicio de los incontables matices y transparencias de nuestra piel.
Pero todo eso no sirve de nada si no se capta la personalidad del retratado, su esencia, y es aquí, más que en la técnica, donde está lo verdaderamente complejo. Podríamos decir que, aunque he pintado y pinto actualmente otros temas, en los retratos encuentro los mayores hallazgos de mi pintura. En cualquier caso, creo que no es hiperrealismo, al menos al que estamos habituados, aunque sí es verdad que mi objetivo último es lograr un resultado natural.
Si pudieras describir tu obra en cinco palabras, ¿cuáles serían?
Luz, naturalidad, identidad, introspección y comunicación.
¿Qué tiene tu obra que motiva a la gente a comprarla?
Puede ser un conjunto de cosas. Primero, que al observador le guste una pintura mía concreta, que piense que tiene belleza. Pero, además, creo que el espectador valora cuando la pintura consigue captar el compromiso y la implicación con los modelos que mis pinturas retratan.
¿Por qué tener un Navarro Menchón en casa?
Creo que no basta con pintar un buen cuadro. El cliente, el coleccionista, además necesita conocer la trayectoria del autor, su momento actual y, sobre todo, su proyección. Porque así, ese buen cuadro que adquiere hoy puede ser además una gran inversión a futuro. En este sentido, mi obra y yo asumimos una gran responsabilidad con las personas que compran mis pinturas y conviven con ellas en sus hogares, en sus empresas o en los edificios públicos donde éstas se emplazan. Agradezco tanto que confíen en mí para su retrato o el de su familia, o que adquieran una obra de las demás series, que quiero corresponder con mi total compromiso de que hago y haré todo para que además haya sido una inversión a futuro.
Háblanos un poco sobre tus creaciones, en específico.
Haber hecho el primer retrato oficial del actual rey de España, S.M. D. Felipe VI, hace que te especialices en retrato, hasta el punto en que ya he hecho cuatro retratos del monarca para organismos oficiales, además de numerosas personalidades y particulares, pero eso sólo es una parte de mi trabajo. Mis obras también abordan el paisaje, interiores, pintura histórica, retratos más personales (como por ejemplo mi serie “Catrinas”), y hasta una colección más desenfadada, pero que también requiere una gran investigación por mi parte, como la fusión de Star Wars con las pinturas iconográficas del arte mexicano y español.
¿Qué te llevó a intervenir La fragua de Vulcano y Las meninas con los personajes de Star Wars?
Por un lado, acercar de manera simpática a un público más joven el arte más clásico, como el de Velázquez, pero también el desafío de interrelacionar en una misma obra dos culturas, o más bien dos universos, que acaben perfectamente integrados como metáfora de la humanidad. Ha tenido un éxito abrumador entre el público adulto y el joven. Puedo adelantar aquí que estoy trabajando en una nueva serie de óleos basada en la cultura y el arte mexicano, que muy pronto se presentará en este país.
¿Tu colección de obra histórica tiene relación con alguna etapa de tu vida, por ejemplo, la militar…?
Pues no lo sé. Es probable, pero creo que la historia es fundamental, que se debe aprender de todo, de lo bueno para profundizar en esa línea, y de los errores para no repetirlos.
¿Qué encuentra Antonio Navarro Menchón al venir a pintar a México?, ¿qué caracteriza a los mexicanos que le han pedido que pinte un retrato para ellos?
En México, la pasión por el arte se vive y se disfruta. Me encanta la cultura mexicana, y ya forma parte de varias series de mi pintura. Por ejemplo, en días recientes fui finalista en el “55 Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura”, un prestigioso certamen internacional que se celebra en España, y participé con uno de mis retratos de la serie “Catrinas”.
Sé que vienes a México a entregar obra y a entrevistarte con posibles clientes que quieren tus obras o que hagas un retrato para ellos… ¿En qué fechas vendrás a México y qué ciudades visitarás?
Por la pandemia he tenido que cambiar las fechas de mi visita a México. Pero, en general, voy a México dos o tres veces al año, dependiendo de mis compromisos en España y en otros países. Intento que el tiempo que permanezco en su país me permita entregar obra, mantener entrevistas y llevar a cabo sesiones fotográficas para los encargos de mi obra. En esta ocasión ya tengo varias fechas reservadas en Querétaro, San Miguel de Allende y CDMX, y aún estoy cerrando la agenda.
